Amanda Grace siempre tuvo una especial devoción por la Virgen. Cayó en un agudo alcoholismo que iba a quitarle la vida, hasta que María entró en escena (ver artículo)
«Me puse de rodillas y le dije: `Me han dicho que eres madre. Si eres madre de todos, también eres mi madre... me tienes que ayudar a llegar a tu Hijo» (ver artículo)
En 1696, el obispo de Quito, estaba enfermo y desahuciado y pidió al pueblo de Guápulo organizar una procesión del Rosario. Al salir, apareció una imagen de María apareció, formada por las nubes. (ver artículo)
La Virgen María promete que, a los que propaguen el rezo del rosario, recibirán asistencia en sus necesidades y protección y gracias abundantes. (ver artículo)
Cuando se confía verdaderamente en una persona, se le confía el cuidado propio, sabiendo que esa persona especial nos cuidará y nos protegerá. (ver artículo)
Bienaventurada Virgen María, por la gracia que hallaste ante el Señor, por las prerrogativas que mereciste y por la misericordia que engendraste, escucha nuestros ruegos... (ver artículo)