Santo Domingo Savio
Su amor a Jesús. La misa y la comunión cotidiana, enseñan a Domingo a considerarlo como Salvador de su alma y de la de sus compañeros. (ver artículo)
¡Oh Don Bosco Santo! Por el amor ternísimo que tuviste a María Auxiliadora, vuestra Madre y Maestra; alcánzanos una verdadera y constante devoción a tan dulcísima Madre! [Del 22 al 30 de enero] (ver artículo)