sacerdocio – Reina del Cielo https://www.reinadelcielo.org Wed, 07 Aug 2024 12:35:44 +0000 en-US hourly 1 https://wordpress.org/?v=5.3.9 San Cayetano https://www.reinadelcielo.org/san-cayetano/ Wed, 07 Aug 2024 06:01:00 +0000 http://www.reinadelcielo.org/?p=4868

San Cayetano de Theine, fundador de la Orden de Clérigos Regulares y patrono del trabajo.

San Cayetano de Thiene, presbítero, que en Nápoles, en la región de la Campania, se entregó piadosamente a obras de caridad, especialmente a favor de los aquejados de enfermedades incurables, promovió cofradías para formar religiosamente a los laicos e instituyó los Clérigos Regulares, para la reforma de la Iglesia, enseñando a sus discípulos a seguir la primitiva manera de vida apostólica (1547).

Su padre fue Conde Gaspar de Thiene y su madre se llamaba María di Porto. El padre murió cuando sus dos hijos eran muy pequeños y su piadosa madre dio a sus hijos un admirable ejemplo.

Cayetano estudió 4 años en la Universidad de Padua donde se distinguió en la teología y se doctoró en derecho civil y canónico en 1504. Fue nombrado senador en Vicenza.

Sin embargo, estaba decidido a seguir los estudios sacerdotales. Se trasladó a Roma en 1506. Decía que Dios le llamaba a realizar una gran obra. Al poco tiempo fue nombrado secretario privado del Papa Julio II. Ayudaba al Papa a escribir las cartas apostólicas. Conoció de cerca a cardenales y prelados.

El Papa muere en 1513 y Cayetano decide no continuar en el cargo. Se preparó durante 3 años para ser sacerdote. Fue ordenado en 1516, a los 36 años. Celebra su primera misa y queda sobrecogido por el don del que no se considera digno.

Funda en Roma la “Cofradía del Amor Divino”, una asociación de clérigos que se dedicaba a promover la gloria de Dios. Tuvo su primera experiencia pastoral en la parroquia de Santa María de Malo, cerca de Vicenza; luego se dedicó a cuidar los santuarios esparcidos por el monte Soratte.

San Cayetano 2

Ingresó en el oratorio de San Jerónimo que tenía los mismos fines que la cofradía del Amor Divino, pero incluía a laicos pobres. Sus amigos se molestaron mucho por eso, porque consideraban que aquello era indigno para un hombre de gran alcurnia como él. A Cayetano no le importó. Ayudaba y servía personalmente a los pobres y enfermos de la ciudad y atendía a los pacientes de las enfermedades repugnantes.

Cayetano se preocupaba mucho por el bien espiritual de su congregación. Solía decir: “En el oratorio rendimos a Dios el homenaje de la adoración, en el hospital le encontramos personalmente”.

Fundó otro oratorio en Verona. Se trasladó a Venecia en 1520, siguiendo el consejo de su confesor, Juan Bautista de Crema, un dominico santo y prudente. Se alojó en el hospital de la ciudad y siguió la misma forma de vida. Se le consideraba fundador principal del hospital por todos los regalos que hizo.

¿Por que tiene al Niño Jesus en sus brazos?

La devocion de Cayetano por Maria era tan grande, que un día rezaba fervorosamente frente a una imagen de la Virgen, y Ella quedó tan conmovida por su fe, que le entrego al Niño en sus brazos. El pudo tener a Dios hecho Niño por unos momentos, experiencia que marcó su vida para siempre.

La Eucaristía

Implantó la bendición con el Santísimo Sacramento y promovió la comunión frecuente, en los 3 años que vivió en Venecia. Escribió: “No estaré satisfecho sino hasta que vea a los cristianos acercarse al Banquete Celestial con sencillez de niños hambrientos y gozosos, y no llenos de miedo y falsa vergüenza”.

La cristiandad pasaba por un periodo de crisis. La corrupción debilitaba a la Iglesia. Cayetano era uno de los que más imploraban la verdadera reforma de vida y de costumbres dentro de la Iglesia. Repetía a menudo: “Cristo espera, ninguno se mueve”.

Fundador

San Cayetano 3

San Cayetano regresó a Roma para hablar de la reforma con los miembros de la Cofradía del Amor Divino en 1523, en compañía del obispo de Teato Giampietro Carafa, de Bonifacio Colli y de Pablo Consiglieri. No solo predicó la reforma, sino la llevó a cabo fundando con sus tres compañeros una orden de Clérigos Regulares que tomasen como modelo la vida de los Apóstoles. La llamaron “Ordo Regularium Theatinorum” o Congregación de los Teatinos (el nombre de padres teatinos viene del episcopado de “Teate Marrucinorum” ), y tenía como finalidad principal la renovación del clero.

Clemente VII aprobó la fundación el 14 de septiembre de 1524. Cayetano renuncia a todos sus bienes y Carafa a los 2 episcopados de Brindis y de Chieti.

Los 4 primeros miembros visten sus hábitos religiosos y hacen los votos en San Pedro, ante un delegado pontificio. Carafa es nombrado superior general de la orden. Aparte de la renovación del clero, sus otros objetivos eran la predicación de la sana doctrina, el cuidado de los enfermos y la restauración del uso frecuente de los Sacramentos.

Los seguidores no eran muchos. A los 4 años, en 1527, cuando la orden tenía 12 miembros, el ejercito saqueó la ciudad, la casa fue destruida y ellos escaparon a Venecia. En 1530 San Cayetano sucede a Carafa en el cargo de superior. Por su humildad, lo hace con renuencia.

Trabaja enérgicamente por la reforma del clero. En 1533, Carafa fue elegido superior general por segunda vez. Cayetano es enviado a Verona, donde recibe oposición a sus reformas.

Viaja a Nápoles para fundar una casa de su orden. Recibe una casa donada por el conde de Oppido y rechaza otros terrenos. El conde alega que los napolitanos no eran tan ricos y generosos como los venecianos a los que San Cayetano le responde: “Tal vez tengáis razón, pero Dios es el mismo en ambas ciudades. Dios está en Nápoles como en Venecia”.

Se quedó en Nápoles donde había mas trabajo. La ciudad mejoró notablemente gracias a las prédicas y el trabajo apostólico del santo, que en ocasiones tuvo que enfrentarse con laicos y religiosos que predicaban el calvinismo, el luteranismo y otros errores.

Fundó con el Beato Juan Marinoni los “Montes de Piedad” para liberar de la miseria a los pobres y marginados. Esta obra fue aprobada poco antes del Concilio de Letrán. En sus últimos años de vida abrió hospicios para ancianos y fundó hospitales.

Cae enfermo en el verano de 1547. Los médicos le aconsejan poner un colchón sobre su cama de tablas, el respondió: “Mi salvador murió en la cruz; dejadme pues, morir también sobre un madero”.

Murió en Nápoles a la edad de 77 años, el domingo 7 de agosto de 1547.

Ocho años después de su muerte, el teatino Carafa fue elegido Papa, con el nombre Pablo IV, un auténtico reformador, aunque su pontificado fue muy impopular.

Cayetano fue canonizado en 1671 después que la comisión encargada terminara de examinar rigurosamente los numerosos milagros.

ORACIÓN
Glorioso San Cayetano,
aclamado por todos los pueblos
padre de providencia porque socorres con grandes milagros
a cuantos te invocan en sus necesidades:
acudo a tu altar,
suplicando que presentes al Señor
los deseos que confiadamente deposito en tus manos.

(Aquí se expresan las gracias que se desea obtener)

Haz que estas gracias,
que ahora te pido, me ayuden a buscar siempre el Reino de Dios y su Justicia,
sabiendo que Dios
(que viste de hermosura las flores del campo
y alimenta con largueza las aves del cielo)
me dará las demás cosas por añadidura.
Amén.

____________
Fuente: Corazones.org

]]>
Lluvia de bendiciones, por María Vallejo-Nágera https://www.reinadelcielo.org/lluvia-de-bendiciones-por-maria-vallejo-nagera/ Fri, 26 Sep 2014 09:09:58 +0000 http://www.reinadelcielo.org/?p=2413 Esta historia verídica viene de la pluma de María Vallejo-Nágera. Nos cuenta la Gracia y la enseñanza que recibió de Dios, a través de un sacerdote amigo, el padre Juan.

¡Disfruten de la lectura!

Lluvia de bendiciones

Cada día que pasa evito más a los eruditos que se creen listos y me acerco más a humildes sabios, querido lector… Los primeros me aburren una barbaridad: solo hablan sobre ellos y lo hacen con prepotencia. Es difícil encontrar un intelectual de corazón humilde: yo diría que tan difícil como encontrar una aguja en un pajar… Pero la cosa cambia cuando Dios me presenta a un corazón humilde: es entonces cuando abro los oídos y escucho con tiento. El aprendizaje llega sin demora y siembra huella en mí.

Así sucedió hace poco, cuando tuve la fortuna de conocer a un misionero comboniano, chiquito de estatura y de tez tostada, enamorado de la Iglesia que representa. Nuestra amistad floreció muy deprisa. “No soy un buen teólogo, hija”, decía, encogiéndose de hombros. “Pero mi Iglesia católica sí lo es”. Yo me percaté pronto de la calidad humana de su alma, de la sinceridad y humildad de su corazón. Así que decidí aprovechar cada momento a su lado y escuchar…

Mision Padre JuanitoY así, un día, recibí una inmensa lección sobre el poder del sacerdocio que jamás olvidaré… ¡Ay, si todos los sacerdotes tuvieran la fe en la Iglesia y sus regalos espirituales como la del padre Juan! Sin duda, otro gallo cantaría, querido lector…

Sucedió un día de invierno madrileño en el que la lluvia decidió azotar mi cuidad. Los rayos caían furiosos desde el cielo, atravesando nubarrones oscuros como el betún. Truenos fortísimos golpeaban el asfalto, las casas y las calles, invitando a la gente a mirar curiosa y aterrorizada por las ventanas. “¡Qué barbaridad!”, susurré asustada, mientras observaba cómo una cortina de agua impedía ver la zona opuesta de la calle. “Nunca he visto llover de esta manera, padre Juan…”. El sacerdote amigo permaneció callado a mi lado. “Tengo hasta miedo…”. añadí. Pero el padre Juan seguía sin contestan Le miré y observé que tenía los ojos cerrados. Entonces hizo algo raro: murmuró algo tan bajito que nada pude entender, levantó las manos hacia la ventana y, acto seguido, hizo una gran señal de la Cruz.

Yo le miré extrañada… Entonces, él abrió los ojos, sonrió y me dijo: “No tengas miedo, hija. Acabo de bendecir toda el agua que está cayendo sobre tu ciudad. ¿Acaso no tengo manos consagradas? Pues ya está: Madrid está recibiendo ahora mismo una sobreabundancia de bendiciones. El agua bendecida es un sacramental: no lo olvides nunca, hija…”.

¡Vaya lección! Conozco muchos teólogos que jamás hubieran bendecido el agua que Dios nos enviaba a borbotones sobre mi amada cuidad. Con probabilidad, se hubieran burlado de este pequeño misionero de gran fe… Ya se lo he dicho, querido lector: aprendo mucho más de la gente humilde que de los grandes eruditos.

www.mariavallejonagera.com
 

Si deseas descargarte el texto en formato PDF, haz click aquí


Prueba1María Vallejo-Nágera (Madrid, 1964), es licenciada en Filosofía y Ciencias de la Educación por la Universidad Complutense de Madrid, y una referencia en la narrativa contemporánea en español. Enormemente popular, su estilo fresco, vivo y atrayente, la ha convertido en una de las escritoras más leídas en nuestro país. Sus novelas han sido traducidas al inglés, francés, polaco y portugués.
Es autora de novelas de inmenso éxito como “Un Mensajero en la noche” (reeditada hasta 26 veces), “Luna Negra”, “El Patio de los Silencios”, “El castigo de los ángeles”, “La Nodriza”, “Mala Tierra”, y la colección infantil de “Lola Torbellino”.
Investigadora incansable sobre los misterios espirituales católicos, ganó inmensa popularidad con sus dos ensayos “Entre el cielo y la tierra: historias curiosas sobre el Purgatorio” y “Cielo e Infierno: verdades de Dios”. Con “De María a María”, (su undécimo trabajo literario), la autora se sumerge en el fascinante misterio del amor de la Virgen María. Se publicará próximamente.
María Vallejo-Nágera está casada y es madre de tres hijos. Vive entre Madrid y Londres.

]]>