San Fermín, obispo de Pamplona. El obispo de Tolosa San Saturnino le envió a predicar el Evangelio a Pamplona, le consagró por su primer obispo y, vuelto después de algunos años a las Galias, predicó el Evangelio en el norte de Francia, muriendo (ver artículo)
Patrono de los estudiantes, el santo que volaba, hizo muchos milagros que él siempre atribuía a la intercesión de la Santísima Virgen María. (ver artículo)