Mística – Reina del Cielo https://www.reinadelcielo.org Fri, 27 Aug 2021 09:51:15 +0000 en-US hourly 1 https://wordpress.org/?v=5.3.9 La Trasverberación de Santa Teresa https://www.reinadelcielo.org/la-trasverberacion-de-santa-teresa/ Fri, 27 Aug 2021 09:37:25 +0000 http://www.reinadelcielo.org/?p=25909

Pero el origen de esta forma de relación íntima con Dios y su explicación hemos de buscarla mucho más atrás. No hay que olvidar que los místicos beben de las Escrituras, y el Cantar de los Cantares fue para muchos, entre ellos la Santa, allí leemos “Vulnerasti cor meum” en Ct. 4, 9, haciendo del corazón ese “sitio” poderoso del encuentro entre Dios y el alma.

La Trasverberación de Santa Teresa. 26 y 27 de agosto

“Quiso el Señor que viese aquí algunas veces esta visión: veía un ángel cabe mí hacia el lado izquierdo, en forma corporal, lo que no suelo ver sino por maravilla; aunque muchas veces se me representan ángeles, es sin verlos, sino como la visión pasada que dije primero. En esta visión quiso el Señor le viese así: no era grande, sino pequeño, hermoso mucho, el rostro tan encendido que parecía de los ángeles muy subidos que parecen todos se abrasan. Deben ser los que llaman querubines, que los nombres no me los dicen; mas bien veo que en el cielo hay tanta diferencia de unos ángeles a otros y de otros a otros, que no lo sabría decir. Veíale en las manos un dardo de oro largo, y al fin del hierro me parecía tener un poco de fuego. Este me parecía meter por el corazón algunas veces y que me llegaba a las entrañas. Al sacarle, me parecía las llevaba consigo, y me dejaba toda abrasada en amor grande de Dios. Era tan grande el dolor, que me hacía dar aquellos quejidos, y tan excesiva la suavidad que me pone este grandísimo dolor, que no hay desear que se quite, ni se contenta el alma con menos que Dios. No es dolor corporal sino espiritual, aunque no deja de participar el cuerpo algo, y aun harto. Es un requiebro tan suave que pasa entre el alma y Dios, que suplico yo a su bondad lo dé a gustar a quien pensare que miento”. (Vida 29, 13).

Con este texto anterior describe la Santa Madre un fenómeno místico cuya base es el amor entre Dios y la criatura humana. Siendo el amor de Dios inconmesurable, perfecto y puro, los efectos que causa en el alma son casi indescriptibles por el místico, que tiene que recurrir a imágenes para poder expresarlo. La santa lo vive como un dardo encendido, pero otros lo experimentarán de otra manera. Santa Margarita de Alacoque lo describe como un intercambio de corazones, donde Dios posee el corazón de la santa hasta casi suplantarlo, purificando los afectos, emociones y movimientos. La Beata Ángela de Foligno (a quien la Santa es probable leyera), lo describe como “una guadaña” que entra en el corazón una y otra vez, y la deja en plenitud de Dios. San Pío de Peltreccina lo describe con un suceso que es casi exacto al de la Santa Madre.

Otro texto de la santa, repite la experiencia como un tipo de oración, y ella misma reconoce que utiliza imágenes comparaciones cotidianas como explicación ante lo inefable del hecho y sus efectos:

“Otra manera harto ordinaria de oración es una manera de herida, que parece al alma como si una saeta la metiesen por el corazón, o por ella misma. Así causa un dolor grande que hace quejar, y tan sabroso, que nunca querría le faltase. Este dolor no es en el sentido, ni tampoco es llaga material, sino en lo interior del alma, sin que parezca dolor corporal; sino que, como no se puede dar a entender sino por comparaciones, pónense estas groseras, que para lo que ello es lo son, mas no sé yo decirlo de otra suerte. Por eso, no son estas cosas para escribir ni decir, porque es imposible entenderlo sino quien lo ha experimentado… Porque las penas del espíritu son diferentísimas de las de acá”. (Relaciones 5, 17).

San Juan de la Cruz da una explicación de este fenómeno en “Llama de amor viva”, y aunque no menciona a la santa Madre, es evidente que se basa en su vivencia para explicar la trasverberación del corazón:

“…la llaga del cauterio de amor no se puede curar con otra medicina, sino que el mismo cauterio que la hace la cura, y el mismo que la cura, curándola la hace; porque cada vez que toca el cauterio de amor en la llaga de amor, hace mayor llaga de amor, y así cura y sana más por cuanto llaga más. Porque el amante, cuanto más llagado, está más sano, y la cura que hace el amor es llagar y herir sobre lo llagado, hasta tanto que la llaga sea tan grande, que toda el alma venga a resolverse en llaga de amor. Y de esta manera, ya toda cauterizada y hecha una llaga de amor, está toda sana en amor, porque está transformada en amor.

Y en esta manera se entiende la llaga que aquí habla el alma: toda llagada y toda sana. Y porque, aunque está toda llagada y toda sana, el cauterio de amor no deja de hacer su oficio, que es tocar y herir de amor, por cuanto ya está todo regalado y todo sano, el efecto que hace es regalar la llaga, como suele hacer el buen médico. Por eso dice aquí bien el alma: ¡Oh llaga regalada!

Este cauterio y esta llaga podemos entender que es el más alto grado que en este estado puede ser, porque hay otras muchas maneras de cauterizar Dios al alma que ni llegan aquí ni son como ésta, porque ésta es toque sólo de la Divinidad en el alma, sin forma ni figura alguna intelectual ni imaginaria.

Pocas almas llegan a tanto como esto: mas algunas han llegado, mayormente las de aquellos cuya virtud y espíritu se había de difundir en la sucesión de sus hijos [alusión a la santa], dando Dios la riqueza y valor a las cabezas en las primicias del espíritu según la mayor o menor sucesión que había de tener su doctrina y espíritu.”

Pero el origen de esta forma de relación íntima con Dios y su explicación hemos de buscarla mucho más atrás. No hay que olvidar que los místicos beben de las Escrituras, y el Cantar de los Cantares fue para muchos, entre ellos la Santa, allí leemos “Vulnerasti cor meum” en Ct. 4, 9, haciendo del corazón ese “sitio” poderoso del encuentro entre Dios y el alma.

La fiesta de la Trasverberación del corazón de Santa Teresa llegó a la Orden del Carmen Descalzo en 1726 con categoría de Doble de Segunda Clase, y a 27 de agosto. Posteriormente pasó al 26, aunque Alba de Tormes, donde se custodia el corazón traspasado e incorrupto de la Santa, la celebra aún a 27. Luego de la reforma litúrgica derivada del CV II, se acentuó el carácter simbólico y místico del hecho más que el aspecto físico de la llaga visible en el corazón de la Santa. Al mismo tiempo, quedó con categoría litúrgica de memoria obligatoria para las monjas carmelitas descalzas y memoria libre para los religiosos y terciarios.

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Fuente: Religión en Libertad


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La Madre Teresa se sintió totalmente abandonada por Dios https://www.reinadelcielo.org/la-madre-teresa-se-sintio-totalmente-abandonada-por-dios/ Fri, 08 Apr 2016 12:38:35 +0000 http://www.reinadelcielo.org/?p=6667 Hay muchas cosas sobre la Beata Madre Teresa de Calcuta que podrían llamarse “heroicas”, como su incansable servicio a los más pobres entre los pobres y su valiente testimonio ante millones de personas sobre lo que es vivir el Evangelio. Sin embargo, el P. Brian Kolodiejchuk, postulador de la causa de canonización de la Madre Teresa, dijo:

Hay una cosa sobre la fundadora de las Misioneras de la Caridad que está por encima del resto: su experiencia de la oscuridad espiritual, como un sentirse totalmente abandonada por Dios durante gran parte de su vida.

El P. Kolodiejchuk, miembro de la rama sacerdotal de los Misioneros de la Caridad, fundado por la futura santa en 1989, dijo a ACI Prensa que, pasar por esta oscuridad y seguir adelante con su labor a favor de los demás, “es realmente muy heroico”.

Como se recuerda, uno de los primeros pasos para declarar a alguien santo es determinar sus virtudes heroicas. En ese sentido, el postulador dijo que la vida entera de la Madre Teresa fue vivida heroicamente, algo que se desprende de los testimonios.

Pero el aspecto más heroico de la vida y la vocación de la Madre Teresa —agregó el religioso— son los más de 50 años de oscuridad y abandono que sentía después de recibir lo que ella denomina “una llamada dentro de la llamada”, para salir de las Hermanas de Loreto y fundar las Misioneras de la Caridad.

Así, aunque era común ver a la religiosa albanesa sonriendo, en su carta a su director espiritual en 1957, la beata escribió:

“Llamo, me aferro, quiero, y no hay quien responda. Donde intento elevar mis pensamientos al cielo, hay tal convicción de vacío que esos mismos pensamientos retornan como cuchillos afilados y dañan mi alma”.
“Amor –la palabra-, no trae nada. Me dicen que Dios vive en mí, y todavía la realidad de oscuridad y frialdad y vacío es tan grande que nada toca mi alma”.

Madre Teresa de Calcuta 3La Madre Teresa había orado fervientemente para compartir el sufrimiento de Jesús, y muchos, incluyendo a su director espiritual, creyeron que sus sentimientos de rechazo y abandono eran un espejo de la propia experiencia de Cristo de la soledad y la desolación durante su pasión y muerte.

Debido a la profundidad y duración de desierto espiritual de la Madre Teresa, muchos la han aclamado como una gran mística cuando se trata el tema de la oscuridad espiritual.

El mismo P. Kolodiejchuk dijo que la Madre Teresa era “una gran mística, pero también muy concreta, muy en la tierra”. Señaló que una gran cantidad de personas “piensan que los santos están en algún lugar en las nubes místicas”, pero esto no era cierto en la Madre Teresa, que era espiritual, pero también atenta y activa en la vida de los demás.

Recordó que desde el primer momento en que la conoció, la mayor de las cualidades distintivas de la Madre Teresa fue “este sentido que era en realidad ‘madre’”, pues ser madre era algo importante para ella, y fue la única manera en que fue llamada.

Así, cuando la Madre Teresa fue elegida por primera vez superiora general de las Misioneras de la Caridad, su respuesta inmediata después de las felicitaciones fue decir “Oh, eso no significa nada, el título. No, yo quiero ser una madre”.

La religiosa también puso un gran énfasis en la ternura de Dios, dijo el P. Kolodiejchuk, recordando que “tierna” era una de sus palabras favoritas, incluso más que “misericordia”.

“Ella hablaría más sobre el tierno amor de Jesús y su misericordia; su consideración, su presencia, su compasión… Así misericordia era una palabra en su vocabulario, pero con esta cualidad especial de ternura”.

“Incluso en la oscuridad ella todavía tenía un sentido íntimo de la ternura de Dios para con nosotros” —dijo el sacerdote— que recitó una oración que la Madre Teresa solía enseñar para que otros repitieran: “Jesús, en mi corazón, creo en tu tierno amor por mí. Te amo.”

En ese sentido, el P. Kolodiejchuk también dijo que es providencial el hecho que la canonización de la religiosa se lleve a cabo durante el Jubileo de la Misericordia, ya que la misión principal de las Misioneras de la Caridad es responder al capítulo 25 del Evangelio de Mateo, que enumera las obras de misericordia.

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Fuente: Aciprensa
Traducido y adaptado por Eduardo Berdejo. Publicado originalmente en CNA.

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Mística y vidente, Beata Isabella Canori https://www.reinadelcielo.org/mistica-y-vidente-beata-isabella-canori/ Fri, 16 Jan 2015 07:32:13 +0000 http://www.reinadelcielo.org/?p=3245 Isabella Canori Mora llevó su vida de madre y esposa a la plena conformación con Cristo en la cotidianeidad y en la adversidad de tener un esposo que la maltrataba. Ella nació el 21 de noviembre de 1774. Hija de Tommaso y Teresa Primoli, en el seno de una familia de posición acomodada, profundamente cristiana y diligente en la educación de sus hijos.

Estudió con las Hermanas Agustinas de Cascia (1785-88), donde destacó por su inteligencia, una profunda vida interior y su espíritu de penitencia. De regreso a Roma, tuvo una vida tranquila hasta que en 1796 -cuando tenía 21 años- se casó con el joven abogado romano Cristóforo Mora.

Para ella, el matrimonio fue una decisión reflexionada, madura, pero después de algunos meses, la fragilidad psicológica de Cristóforo comprometió la serenidad de la familia.

Beata Isabel Canori 2El marido de Isabella resultó ser un hombre infiel y maltrató a su esposa, física y psicológicamente. Dejó de trabajar y malgastó el dinero que tenía la familia, hasta caer en una extrema pobreza. A todo esto, Isabella respondió siempre con absoluta fidelidad. Nunca puso excusas, conveniencias o intereses para justificar un abandono de su hogar, trató a su marido con paciencia gentil, ofreciendo penitencias y oraciones por su conversión. Nunca pensó en separarse de él, a pesar de los consejos de familiares y amigos. En vez de esto, siempre amó, apoyó y perdonó a su esposo esperando su conversión.

En 1801, ella sufrió una misteriosa enfermedad que la puso al borde de la muerte. Se curó de forma inexplicable y tuvo su primera experiencia mística. Esta es una vidente italiana de las tribulaciones de los últimos tiempos de la Iglesia, que fue favorecida con los dones de la visión y de la profecía. Recibió las visiones y las ilustraciones sobre el destino de la Iglesia. Experimentó los estigmas de la pasión de Cristo, y en sus visiones vio las tremendas batallas que tendrá que sostener la Iglesia en los últimos tiempos bajo el poder de las tinieblas.

La familia, para ella, era el templo en el que recibía al “al amado Señor, Jesús de Nazaret” y a todos los que se dirigían a ella. A través de la auto negación, Isabella ofrecía su vida por la paz y la santidad de la Iglesia, la conversión de su esposo y la salvación de los pecadores. En 1807 Isabella se unió a la Orden terciaria Trinitaria.

El 5 de febrero de 1825, mientras era asistida por sus dos hijas, Isabella falleció. Fue enterrada en Roma en la iglesia trinitaria de San Carlino alle Quattro Fontane. Poco después de su muerte, como ella misma predijo, su esposo se convirtió uniéndose a la Orden Terciaria Trinitaria y después se ordenó sacerdote de los franciscanos conventuales. Murió el 9 de setiembre de 1845 y fue enterrado en la iglesia de los franciscanos conventuales de Sezze.

Fue beatificada junto al joven mártir Zaire Isidore Bakanja, y a otra madre italiana santa, Gianna Beretta Molla, por el Papa Juan Pablo II el 24 de abril de 1994, en el Año Mundial de la Familia. Su fiesta se celebra cada 4 de febrero.

 

Fuente: www.aciprensa.com

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