Para navegar en este mundo, necesitamos adaptarnos a las cambiantes condiciones que este mundo-mar tumultuoso nos propone cada día. Una vela, una brújula y un ancla serán imprescindibles... (ver artículo)
¡Oh, mi Dios! Veo una fuente, una inmensa fuente a la que van ángeles y santos y derraman cantaros y ánforas, grandes y pequeñas, y no se detienen... (ver artículo)
El Mal se concentra en aquellos puntos desde donde puede influir más en otros: en gobernantes, padres de familia, lideres de empresa, en todo aquel que sea guía de almas (ver artículo)
Muchos caminan por estas calles sin Dios. Lo dejan a un lado y siguen su camino golpeados... ¡Alguien les debe llevar consuelo y esperanza! ¿Qué es lo que vamos a hacer? (ver artículo)
En el punto de unión de los Dos Maderos, en la Cruz, Jesús amó hasta el infinito. Dejó todo allí por nosotros. Su Padre lo envió para que nos salve, conociendo de antemano el precio de nuestra salvación (ver artículo)
Dios nos invita permanentemente a entregar más, a ser más, a poder más. Nos invita a acortar la brecha entre la potencia y el acto, según la voluntad de Dios. (ver artículo)
Cuando las personas no estamos unidas bajo el signo de Dios, Su Palabra resulta en escándalo, controversia, como dicen los Evangelios, porque saca a la luz y expone las oscuras intenciones contrarias al amor (ver artículo)
Dios quiere que juguemos este partido, donde todos integramos Su Equipo. Que lo hagamos con compromiso y que le demostremos con goles de amor nuestra pertenencia a Su Escuadra. (ver artículo)
Ahora miro en el espejo y me reconozco, porque en mi mirada te veo a Ti, en mis pensamientos te siento a Ti, en mis tristezas me uno a Ti, en el dolor sostengo Tu Cruz. (ver artículo)