Arráncale una sonrisa a Jesús, de ese Rostro que puede iluminar las noches de oscuridad de muchas almas, desesperadas y dolientes. Luz que surgirá de Sus Ojos y consolará los corazones que esperan. (ver artículo)
En este mar apático se nada y se nada, buscando una isla donde aferrarse. Y esas islas aparecen, cuando cruzamos nuestro camino con alguien que ve a Dios en lo cotidiano. (ver artículo)
Dios espera que usemos nuestros dones y talentos para Su obra. Para ello debemos reconocerlos y trazar un plan de vida. ¿Tienes un plan de vida? ¿Sabes que espera Dios de ti? (ver artículo)
Es Dios el que establece los modos, los tiempos y las circunstancias que rodean nuestras horas de prueba, y Gracia. Y la entrega a la Voluntad del Maestro, del Señor, es nuestro consejo de vida. (ver artículo)
Un alma que Dios crea es algo que, en sus últimas circunstancias, sólo Él puede apagar, del modo que Su Voluntad disponga. Debemos saber vivir del lado de la luz, del lado de Dios. (ver artículo)
El miró a Su Madre como Hombre, y con una sonrisa aceptó el ruego de cambiar Su Voluntad, sabiendo que nada que Ella pidiera podría estar mal. (ver artículo)
Nunca se llega al pecado sin haber antes perdido la batalla frente a la tentación. ¡Sepamos reconocerla, y apartemos a nuestra alma de ella! (ver artículo)
Y tú, ¿a quién te quieres parecer? Acaso a algún personaje famoso... ¿Quieres imitar a Aquél que caminaba por las calles serpenteantes de Jerusalén? (ver artículo)