Dicen que no se fueron desde de los Estados Unidos a un oscuro pueblo en Italia, para terminar como la última sensación en los medios. Pero ahí están, encabezando las listas con el CD Benedicta.

Una docena de hombres que querían retirarse del mundo para dedicarse a Dios, ahora son conocidos en todo el mundo por los cantos que cantan cada día. El show de la CBS News, Sunday Morning, presentó al padre Casiano Folsom, originario de New England y sus hermanos benedictinos en Norcia, el lugar de nacimiento de San Benito. El padre Folsom dejó su vida secular en el año 2000, para restablecer la vida monástica en un lugar donde, irónicamente, no había existido desde 1810.

Lo único que el padre Folsom no dejó atrás, cuando se fue detrás de las paredes de clausura, fue su amor por la música. Los Monjes de Norcia han tratado de restaurar la vida benedictina tradicional, prefiriendo la Misa del Rito Latino Forma Extraordinaria, la llamada Misa Tridentina.

Como se convirtieron en “maestros” en lo que hacen, los monjes hicieron grabaciones privadas para amigos.

Y entonces los “descubrieron”

Ahora, con la ayuda de De Montfort Music, han logrado su lugar junto a los monjes de Silos, España, cuyas grabaciones en la década de los 90 exhibió a millones de oyentes, en todo el mundo, la belleza del canto gregoriano. Y eso es lo que hace felices a los Monjes de Norcia, incluso más que ser el número uno en el Billboard Classical Chart,

“Esto demuestra que hay algo en la música que atrae a la gente, a través de un amplio espectro” —dijo el padre de Folsom. “Y ese algo, creo, es el deseo de lo que la gente hoy llama “espiritualidad”, algo más que la vida cotidiana que llevan”.

Conoce a los monjes

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Fuente: Aleteia.org
Traducción: Admin de Reina del Cielo

El Papa Eugenio III dictaminó: “Sus obras son conformes a la fe y en todo semejantes a los antiguos profetas” y escribió a Hildegarda instándola a continuar la obra y animando y autorizando la publicación de sus obras.
Aprobación tan señalada era el reconocimiento oficial de que la labor de Hildegarda estaba inspirada por Dios. Hildegarda se apresuró entonces, llevada de enardecido celo, á refutar de palabra y por escrito los errores de los herejes cátaros. Así llegó á ser una de las columnas más firmes de la Iglesia por aquel tiempo.

Fue abadesa, líder monacal, mística, profetisa, médica, compositora y escritora alemana. Es conocida como la sibila del Rin y como la profetisa teutónica. El 7 de octubre de 2012 el papa Benedicto XVI le otorgó el título de doctora de la Iglesia junto a San Juan de Ávila durante la misa de apertura de la XIII Asamblea general ordinaria del sínodo de los obispos.

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