La vida de San Juan Evangelista es un misterio para nosotros, porque fue el único Apóstol que no murió como mártir, sino que llegó a la vejez y una muerte serena. El tuvo las visiones que originaron el Libro del Apocalipsis, y fue el único Apóstol que permaneció al pié de la Cruz del Señor, acompañando a María y a las demás mujeres que valientemente resistieron la visión del Calvario de Jesús. Aquí podemos ver una película sobre sus últimos años de vida, para que gocemos de lo que vivió en sus momentos en la isla de Patmos, donde tuvo sus más reconocidas visiones, reflejadas en el Libro de las Revelaciones, el Libro del Apocalipsis.
Juan fue el más joven de los Apóstoles, de hecho era poco más que un adolescente cuando acompañó al Señor por los polvorosos caminos de Galilea y Judea. Juan fue siempre el puro, el lirio que supo elevarse espiritualmente a alturas que se advierten en Su Evangelio, el que se diferencia en estilo y narrativa de los otros tres Evangelios. Juan escribe con pluma elevada a los cielos del que lo inspira, y nos deja las más hermosas lecturas que podemos encontrar en la Biblia.
Los invitamos a disfrutar de este testimonio basado en las Sagradas Escrituras en su mayor parte. Nuestro corazón se alegra, y se entristece, al comprender el sufrimiento de la primera iglesia, la iglesia primitiva.