8 de septiembre, la Natividad de la Virgen, su cumpleaños. En España a la fiesta se le conoce también popularmente como “la Virgen de septiembre“: Covadonga, la Caridad del Cobre, de las Victorias…., es difícil señalar un lugar en el que el pueblo cristiano no haya querido felicitar a su Madre de alguna manera.
Así que, si alguien piensa que he esperado la ocasión para escribir esto hoy, pues… algo de razón no le falta. Y es que haciendo una «investigación» sobre monumentos o símbolos públicos que recuerden el aborto encontré dos advocaciones de la Virgen, Madre de los No Nacidos, en Estados Unidos.
Los hay de todo tipo, no me imaginaba que tantos. Muchos una simple lápida, o «tumbas». Bastantes con referencias al texto de Raquel, que remite a su vez a los Santos Inocentes. Pero también hay grupos escultóricos como el imponente Ángel de la Guarda con el bebé en brazos.
Aunque las imágenes que más me han impresionado son precisamente dos advocaciones a la Virgen y los no nacidos:
La que ilustra este post, en el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, en La Crosse, Wisconsin. Y la del Santuario Nacional de Czestochowa en Pennsylvania.
Estas iniciativas son importantes, no sólo porque sirven para visualizar la realidad del aborto y del cuidado de los más indefensos, también porque ayudan a la conversión de los corazones dañados, al perdón y a dejar el dolor en manos de Nuestro Señor por la intercesión de su Madre.
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Fuente: Infocatólica