Cayeron tres misiles a 50 metros de donde estábamos, hubo más de 400 muertos entre los nuestros, había heridos, la catedral quedó muy dañada… aún así, desde ese mismo día se duplicó la gente en la misa diaria. Es que ellos (los católicos sirios) sufren más, rezan más…
— Hermana, ¿alguna vez se le ha cruzado la idea de la muerte, del martirio por la cabeza?
— Sí, muchas veces. Es parte de la elección que uno hace.
En esta entrevista podemos conocer, de primera mano, lo que significa vivir en estos últimos años, desde 2011 a la fecha actual (noviembre de 2015), en medio del conflicto bélico en Siria.
Conoce a la hermana Guadalupe, religiosa del Instituto del Verbo Encarnado.
¡Un testimonio de entrega y amor al prójimo!