Tan intactas como las ruinas, se conserva el Pan Consagrado en el sagrario que ardió por varias horas durante el incendio que el 24 de diciembre del 2010, el cual consumió la capilla San Pío X del barrio La Enea, Manizales, Colombia.
Ese es precisamente el milagro que veneran el Jueves Santo los creyentes católicos. Existe suficiente documentación sobre hechos, inexplicables para la ciencia, relacionados con Formas Sagradas, Sagrarios, Cálices, Custodias y Elementos Eucarísticos que se conservan pese al paso del tiempo.
El expárroco de San Pío X, Gilberto López, fue el primero en anunciar que algo extraño descubrió luego del incendio: El copón, el velo con que se cubre y las Formas Sagradas estaban en buenas condiciones.
Sin embargo, era más inexplicable que el Pan Eucarístico conservado era el que estaba consagrado, mientras que había otro pan sin consagrar que se volvió carbón.
En mayo del 2013, el canal Discovery documentó el hecho e hizo una simulación del incendio con una réplica del sagrario, pero el resultado fue que todo se carbonizó.
De otro lado, el actual párroco, Luis Gonzaga Duque, comenta que las Formas Consagradas continúan igual. “Si se deja un pan por ahí (algunos de sus componentes son los mismos que los de las hostias) se daña en poco tiempo, pero estas están intactas luego de cuatro años y sin nada especialque las conserve”, contó.
Validación milagrosa
Si bien existen unos mecanismos y protocolos de la Iglesia Católica para validar como milagro la conservación de las hostias luego del incendio, el párroco señala que eso tiene unos costos altos.
“Por ahora baste la fe en la Eucaristía, el testimonio de los que presenciaron el incendio y de quienes sacaron el copón de las llamas”.
Adoración
Elementos del sagrario que sobrevivieron al incendio del 2010.
El padre Luis Gonzaga Duque recibió la parroquia y reconoce que sabía poco del hecho milagroso.
“Cuando llegué, me enteré que no obstante el incendio del 2010, mi Dios dio esa prueba de amor conservándose intacto. Al llegar vi una capilla pequeña especial del Santísimo y el anterior padre me dijo ese es el Milagro Eucarístico”.
También conoció que había poca difusión. Así le surgió la idea de hacer en Semana Santa un homenaje de adoración. Es un hecho de fe, que además conlleva el propósito de la reconstrucción de la capilla y la edificación de un santuario.
Recordó que la protección de la capilla como monumento histórico es una orden, mediante fallo judicial, del Consejo de Estado. “La Nación, el Departamento y el Municipio, van a reconstruir esta capilla que data de 1876, la primera que hubo en Manizales”.
Baja capacidad
Sin embargo, admite que la capilla solo tiene capacidad para 50 personas y que es poca para la ciudadela que cuenta con 50 mil habitantes, en su mayoría católicos, mientras que la comunidad que atiende la parroquia Pío X tiene cerca de dos mil feligreses.
“Hay que construir un santuario grande contiguo a la capilla, para poner en valor el monumento y el Milagro Eucarístico, además de acoger a los católicos”, indicó. Aclaró que pese a los buenos oficios que haga el Estado. “Después de reconstruida trataremos de dotarla rápidamente”.
El mobiliario para la capilla tiene unos costos adicionales que aún no se calculan. Por ejemplo cada banca cuesta un millón de pesos y la capacidad es para 40 bancas. “Dotarlo vale mucho y es la primera tarea que tenemos después de la reconstrucción y luego, si nos dan el permiso, empezar a construir el santuario.
Proyecto de santuario
La parroquia avanza en la formulación de varios proyectos de santuario. El arquitecto Miguel Ángel Aguilar, miembro de la comunidad, está haciendo diseños preliminares, aún no se sabe cómo se obtendrán los recursos que se requieren para hacer el santuario, pues el fallo del Consejo de Estado solo tiene que ver con la capilla.
El párroco, Luis Gonzaga Duque, indicó que cuentan con los predios para construir el santuario, pues son propiedad de la parroquia. Anotó que en la actualidad las proximidades son botaderos de basuras, sanitario de animalesy también las usan los consumidores de estupefacientes.
Insistió en que hay que darle valor al monumento, pero eso se hace también arreglando el entorno. De esta manera, la parroquia de San Pío X quedaría con dos centros de celebración religiosa.
“Tenemos una misión grande, el primer aliado es Dios y empezaremos a tocar puertas”.
Milagros eucarísticos
Se ha llamado milagros eucarísticos a varios hechos relacionados con los elementos de la liturgia, en especial con el vino y las hostias que representan en el rito católico de la misa el cuerpo y la sangre de Jesús.
Hay decenas de casos llamados milagros eucarísticos, algunos han sido investigados por el Vaticano. Entre los destacados están:
Año 700. Lanciano (Italia)
Ocurrió durante una celebración eucarística. En el momento de la consagración del vino y la hostia el monje que realizaba el rezo vio como se transformaban en sangre y carne respectivamente. Los dos elementos, sin el uso de ningún preservante, están aún presentes en un relicario.
1345. Amsterdam (Holanda).
Según la página dedicada a la Virgen Señora de todos los pueblos de esta ciudad, ese año un enfermo terminal vomitó una hostia que había recibido minutos antes. La persona que limpió echó todo al fuego, pero la hostia no se consumió, por el contrario flotó entre las llamas. Al igual que en todos los milagros eucarísticos esa hostia aún se conserva.
1730. Siena (Italia)
Varias páginas católicas narran el hecho como una prodigiosa conservación contra toda ley física, química o biológica. 223 hostias frágiles, consagradas el 14 de agosto de 1730 en la basílica de San Francisco de Siena, en la misma noche fueron profanadas por ladrones, que se llevaron la copa de plata que las contenía y las echaron entre las cajas de limosnas. Los religiosos las recogieron, pero con el tiempo notaron que estas no se degradaban. Hoy permanecen intactas y expuestas a los fieles.
2013. México.
La página del Vaticano www.aciprensa.com da cuenta de que en la Arquidiócesis de Guadalajara se investiga la emanación de sangre en una hostia. Según el relato, el caso ocurrió una tarde de julio, cuando un sacerdote destapó un copón y vio que la hostia estaba cubierta de sangre.
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Fuente: Lapatria.com