En Cuapa, informan fuentes de la Iglesia, que la Santísima Virgen se puso triste y lloró. Bernardo, un fiel, pensó que era por su culpa y le decía: “Señora, perdóneme Usted está enojada conmigo. Perdóneme. Perdóneme”, pero la Virgen le dijo: “Yo no estoy enojada ni me enojo. Me da tristeza la dureza de corazón de esas personas. Pero vos tenés que hacer oración por ellas para que cambien”.
El 19 de Noviembre de 2019, hacia las cuatro de la tarde, se descubrió que lloraba la Santísima Virgen María, en la imagen de Nuestra Señora de Fátima en la Parroquia Santiago, en Boaco Nicaragua. “Yo estuve presente y la vi. Junto a otros fieles de la iglesia rezamos El Santo Rosario y después se quedaron otro grupo también rezando El Santo Rosario”, manifestó la fuente.
La Virgen María expresa con sus lágrimas el gran dolor que se avecina a esta nación y Ella sufre con su pueblo. Pero sabemos que todo tiene que pasar para que Triunfe su Inmaculado Corazón.
El único camino que queda es reparación, reparación, reparación.
___________________
Fuente: Periódico Digital La Jornada