Meditaciones

Herido en mi vanidad

Nuestra vanidad es ese orgullo que nos dificulta aceptar que las cosas son simplemente como son, y que no tiene sentido andar presumiendo o defendiendo quienes somos, o cuanto somos (ver artículo)

Un corazón simple

La verdadera Fe, esa que se vuelve indestructible y nos prepara para hasta dar la vida por el Señor, está hecha de esa sustancia invisible que se instaló en nuestro corazón. (ver artículo)

El poder de un abrazo

El abrazo que Dios nos regala aquí abajo, entre nosotros, es entonces un anticipo de los abrazos que Él mismo nos promete para cuando por Su Misericordia lleguemos a Su Presencia. (ver artículo)

El Club de los rotos

Desde hace años le digo a amigos y hermanos en la fe, que siento pertenezco al Club de los rotos. Muchos me preguntan que es eso, y lo he explicado con el corazón lo mejor que pude... (ver artículo)