Jesús te ama, tú lo sabes bien. Él te mira y desea que estés en Sus Brazos, abrazo espiritual que protege y alimenta. Es tu alma la que debe optar. (ver artículo)
Cada santo representa un distinto modelo de camino, de llegada a la santidad que Dios espera de nosotros. Cristo nos mostró en Su Naturaleza Humana la perfección que Su Naturaleza Divina le infundió. (ver artículo)
El purgatorio es el lugar donde se purifican nuestras impurezas, aquellas manchas que no permiten que nuestra alma se presente ante Dios. Oremos por las Benditas Almas del purgatorio. (ver artículo)
Como él mismo lo gritó al mundo: ¡TOTUS TUUS!. Soy todo tuyo, así se definió, propiedad de la Virgen, totalmente consagrado a Ella. Devoto y enamorado de la Virgen María (ver artículo)
No, Dios no impide nuestros errores, aunque de modo misterioso interviene en aquellas encrucijadas en que Su Voluntad se encuentra condicionada por un desvío demasiado importante. (ver artículo)
Cuando vemos el gesto de un hijo o una hija que nos sorprende con un signo de madurez, no podemos dejar de emocionarnos hasta las lágrimas mientras nuestro corazón exclama en un grito ¡ese es mi hijo! (ver artículo)
Vivimos inmersos en el mundo, por lo que estas pequeñas o grandes experiencias de tentación seguida de pecado ocurren a diario, demasiado a menudo. (ver artículo)
Dios nos ama infinitamente, tanto como para habernos dado a Su Propio Hijo como prenda de nuestra Salvación. Y Jesús murió en la Cruz como Perfecto Cordero de Sacrificio. (ver artículo)