Así fue en Belén, más de dos mil años atrás. Una pareja pobre y callada avanzaba con un pequeño burrito que golpeaba con sus pezuñas las piedras del sendero. (ver artículo)
Santo es el amor que nos tiene Jesús, que al morir nos dejo a Maria, su propia madre, para que nos cuidara y nos guiara por el camino que Dios preparó. (ver artículo)
Que tu buen ángel de la guarda vele siempre sobre ti, que pueda ser tu guía en el camino escabroso de la vida. Que siempre te mantenga en la gracia de Jesús. [Lee la carta completa] (ver artículo)
La verdad es que para Dios no aplican nuestros cortos pensamientos ni nuestros imperfectos sentimientos. Él trae a este mundo a las almas, y las recoge a Su seno también. (ver artículo)