Una película que nos recuerda el extraordinario milagro de Fatima, contado con
notable realismo desde los ojos de los que lo vivieron en el Portugal de 1917.
Cada día crece más y más el efecto de la aparición de la Madre de Dios a los
tres niños de Fatima, como regalo supremo hecho a la humanidad de nuestro
tiempo. Poco se comprende sobre la trascendencia de esta expresión de la
Voluntad de Dios, que ha venido a transformar nuestra visión de la
espiritualidad, de la Iglesia, de nuestra propia conversión. Dios hace estas
maravillas para que creamos con una fe simple y fresca, desde la sencillez de
estos niños. Como niños debemos creer, sin comprender. Los invitamos a disfrutar
este regalo que nos hace transportarnos a la frescura del tiempo, haciéndonos
testigos presenciales de lo que el Inmaculado Corazón de María nos dice, de modo
cercano y personal.