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La redacción de Reina del Cielo
Milagro sobre una imagen de la Guadalupana
en Cochabamba, Bolivia
Los lectores de Reina del Cielo conocen muy bien a Catalina Rivas. Ella recibió del Señor una cantidad de dones, incluido el dictado de varios maravillosos textos que disfrutamos quienes aceptamos con corazón abierto la revelación privada. Es justamente Catalina quien nos relata este milagro ocurrido sobre una imagen de la Virgen de Guadalupe, en Cochabamba, Bolivia.
Tenemos el honor de presentarles la narración que nos realizara Catalina a los editores de Reina del Cielo, que hemos compilado tratando de guardar el espíritu y las palabras de nuestra querida mística.
La Historia
Comienza en Cochabamba el 25 de marzo de 1999, fiesta de la Anunciación del Ángel a la Virgen. El sacerdote, Director Espiritual de Catalina, dirigía una casita de oración. Estos lugares creados por el Apostolado para la Nueva Evangelización (ANE) funcionan en muchos lugares del mundo, y son los grupos de oración que son la célula madre de donde nace y se desarrolla esta Obra de Dios. Esta casita funcionaba en la casa de Catalina en Cochabamba, cerca del Seminario mayor de la Ciudad, y tenía en aquella época un hermoso cuadro réplica de la imagen de la Virgen de Guadalupe, obsequiado a Catalina por un matrimonio de Monterrey, México, años atrás.
Dice Catalina: “El Padre pasaba por el corredor donde estaba la imagen de la Guadalupana y vio que chorreaba un aceite muy perfumado, de la unión de las manos de la Virgen, y a continuación salía algo plateado que brillaba mucho y se iba adhiriendo al aceite. Me llama de inmediato, y yo llamo a todo el grupo del ANE que estaba allí por la fiesta de la Anunciación. Introduzco mi dedo en el aceite y advierto que era muy perfumado, un perfume hermoso que sólo en el Cielo puede existir. Lo plateado era como una escarcha muy finita, casi como un polvo. Como se podrán imaginar, nos emocionamos todos mucho, nuestros corazones galopaban en nuestros pechos como corceles felices y enamorados. El Padre nos pidió que recemos el Santo Rosario en la habitación que servía como una pequeña capilla en la casa”.
En aquella época el lugar tenía un pequeño oratorio privado, no estaba abierto al público. Cuando terminaron de orar, volvieron todos al corredor y advirtieron que las escarchas plateadas eran seguidas por otras de color dorado y luego lila, verde, etc. Y así se fueron agregando colores hasta llegar a la hermosura multicolor con que el vestido de María se fue vistiendo poco a poco. Los fenómenos de escarchamiento de imágenes de la Virgen son bastante frecuentes, tanto que en Venezuela la propia Virgen ha revelado hace algunos años el sentido de cada uno de los colores que se representan. María quiso poner en el hermoso vestido de la Guadalupana el testimonio de su presencia actual, viva y fulgurante como aquel día en que se presentó a Juan Diego en el cerrito Tepeyac.
Pero volvamos al relato de Catalina: “Nos quedamos en oración casi toda la noche, no podíamos dejar de alabar al Dios Bueno que nos hacía un regalo tan maravilloso, a nosotros pobres pecadores. Al día siguiente vinieron camarógrafos y periodistas de la Fox para hacerme un reportaje que habíamos acordado tiempo atrás. El reportaje iba a formar parte de la película Signos de Dios. Para ese momento había ya otras personas en casa, y todos miraban admirados no sólo a la Virgen de Guadalupe que se escarchaba más y más, sino también a una imagen de la Virgen de Fátima que exudaba aceite de su carita a montones. Estábamos todos excitados y felices de ser testigos de tantos signos de Dios. La gente de la Fox dejó una cámara por dos días y dos noches encendida grabando lo que ocurría a la imagen con la escarcha. Luego de tres días el cuadro de la Virgen de Guadalupe estaba totalmente bordado de escarcha en la parte de su vestido, una maravillosa obra de arte celestial que vistió de gloria a la pequeña Niña de Galilea”.
El primer día en que se manifestó este prodigio, los emocionados integrantes del ANE que estaban allí encabezados por EL Director Espiritual de Catalina, su familia y ella misma, avisaron al Señor Arzobispo, Monseñor René Fernández Apaza, quien se hizo presente en compañía de otro sacerdote. Ellos vieron el milagro, y todos juntos rezaron el Regina Coelli a la Virgen. Imaginemos la escena, tiene que haber sido hermoso y emocionante. Allí ellos decidieron que debía crearse un oratorio público en el lugar, en honor de la Virgen.
Dice Catalina: “En esa época realmente no teníamos dinero, no sabíamos cómo llevar adelante ese proyecto. Esa noche yo sueño con el Señor que me pregunta si estoy dispuesta a cederle el living-comedor de mi casa para hacer un oratorio. Yo le decía, en mi sueño, que por supuesto, que mi casa era Su casa. Soñé que el Señor me decía como debía hacer la distribución de la casa hasta el último detalle. Me dijo que le regalara el piso de abajo y que en la planta alta El me haría mi vivienda. Desperté varias veces en la noche, más luego volvía a soñar lo mismo, con más y más detalles de la construcción. Y así fue; sin tener un centavo en seis meses estuvo lista la obra. El día que se pusieron los cimientos apareció la Virgen en el cielo. Al enseñarle el lugar a mi Director Espiritual, tomamos fotografías con una máquina polaroid. Se formó en cuestión de segundos un enorme y hermoso arcoiris que parecía nacer justo frente a casa, y ahí entre las nubes se dibujó la preciosa Madre dando su bendición. La vieron los albañiles, las personas que estaban en casa y también el Padre. Fue un día muy emocionante para todos…”.
Las dos devociones de Catalina son el Sagrado Corazón y la Virgen de Guadalupe, así que ella decidió llamar al lugar como ?Oratorio del Corazón de Maria de Guadalupe?. Una perfecta síntesis que revela que el Corazón de Uno, Jesús, está con el Corazón del Otro, de María. De inmediato la gente empezó a acudir al lugar, amigos, gente del ANE. Todo el mundo tocaba las escarchas, que se habían producido sobre el vidrio. De tal modo hubo que poner vidrio sobre vidrio para proteger el milagro de la mano de los peregrinos que acudían a admirar la obra de Jesús en el vestido de Su Mamá.
Detalles del milagro
El cuadro es un póster de papel, y siempre tuvo un vidrio delante.
Cuando ocurrió el milagro, toda esa especie de purpurina, todo el brillo, quedó pegado en el cristal y en el resto del cuadro, incluso cayendo hasta en el suelo. Quedó el cuadro, la imagen, escarchada.
La gente se enteró, corrió la voz, y todos pasaban a ver y tocar aquello. Entonces se decidió poner otro vidrio encima, que cubría el anterior que tenía todo lo que brotó de las manos de la Virgen.
A pesar de esta protección, que en principio generaría una “inmovilidad” de todo lo que apareció, lo que decíamos esa especia de purpurina, sin embargo Beatriz ve que hay cambios constantemente. Cambia o aumenta todo aquello.
El oratorio
Esta maravilla puede contemplarse aún en la actualidad, y de hecho ustedes pueden admirar varias fotografías que acompañan nuestro relato. Catalina, aun emocionada después de tantos años, nos relató esta hermosa muestra del amor de Dios por todos nosotros. El oratorio fue bendecido por Monseñor René Fernández, Arzobispo Emérito de Cochabamba, y en ese día se contó con la presencia especial de la Concelebración de tres Obispos y doce Sacerdotes, un verdadero regalo de Dios.
Se han dado muchas sanaciones físicas y sobre todo la imagen de la Virgen ha suscitado muchas conversiones.Hoy día, en Cochabamba, la gente sigue admirando este hermoso vestido que se ha puesto la Virgen de Guadalupe. Escarchas de todos colores son el tejido que la cubre, reflejo de la Gloria de Dios que desciende entre nosotros.
Este testimonio fue recibido de Catalina Rivas y editado por Reina del Cielo.
Experiencia de una misionera
Eugenia tuvo la gracia de poder viajar a Cochabamba y visitar el santuario donde el cuadro de la Virgen quedó escarchado., Ella nos cuenta lo siguiente:
Mi experiencia en Cochabamba, Bolivia
¡ ELLA es terrible ¡
A mi modo de ver, fue ELLA la que ideo un Torneo Sudamericano de Golf de Damas Senior en Cochabamba. Todos se preguntaba, ¿Por qué en Cochabamba? Habiendo tantas otras ciudades en Bolivia mas aptas por la altura y la geografía y con mejor acceso aéreo. Pero todo me hace pensar que fue ELLA la que eligió ese lugar, o al menos, me gusta pensarlo así.
Faltando unos pocos días para mi viaje, me entero de manera ¨casual¨ que en Cochabamba se encontraba El Milagro del cuadro escarchado de la Virgen de Guadalupe. Este Milagro ocurrió hace muchos años en la casa de Catalina Rivas mientras un grupo de Oración rezaba el Santo Rosario. Primero empezaron a sentir un fuerte aroma a rosas y luego a ver como de las manos de La virgen brotaban brillitos de colores, (algo así como lo que nosotros conocemos como purpurina o brillantina) y se iba derramando sobre su vestido, quedando este como cubierto de un bordado lujoso como de brillos y piedras. Un vestido digno de una Reina. Los allí presentes enseguida se dieron cuenta de que estaban presenciando un MILAGRO.
Cuando me entero de esto enseguida pensé: ¨Que casualidad¨, justo donde yo voy a ir. ¡No me lo pierdo ni loca ¡Ahora mi viaje cobraba un doble sentido!
Llegamos a Cochabamba un sábado a la noche. Todas las integrantes de la delegación de Argentina, con mucho criterio, habíamos decidido llegar un día antes del comienzo del torneo (iniciaba el lunes) como para aclimatarnos a la altura. Yo ya desde Buenos Aires lo tenia todo planeado. Ese mismo Domingo iría a la casa de Catalina.
Pero me tope con una sorpresa. Ese día era un Domingo Peatonal, estaba prohibida la circulación de autos. Era una especie de día festivo en la ciudad, muy pintoresco por cierto, pero averigüe y me informaron que me seria imposible llegar hasta allí ese día. El lugar del Milagro se encontraba en un barrio en las afueras de la ciudad, como a unos 15 km del hotel donde nos alojábamos.
Algo similar me ocurrió el lunes, el martes y el miércoles. Por diferentes motivos no pude ir. Luego de la competencia del dia siempre habia, ceremonias o eventos propios del mismo torneo. ¡Imposible zafarme ¡
Ya sabia que cuando pudiera, iria sola. No habia conseguido insentivar a ninguna compañera para que me acompañara. El que estuvo a punto de acceder habia sido mi caddy , pero luego se habia hechado atrás tambien.
Bueno, ya estaba empezando a preocuparme. El viernes ya estaba descartado, fin del torneo y posterior Ceremonia de Clausura y entrega de premios, el sabado ya me volvia, en fin, solo me quedaba el jueves.
Asi fue que el jueves, cuando termine mi torneo, directo desde el club, asi como estaba, hasta con los zapatos de golf, me tome un taxi y me fui a la casa de Catalina Rivas. Tenia la direccion y el horario a partir del cual habia gente que me podia recibir. ¡Nada mas¡
Tambien sabia que la gente que cuida de esta bendecida casa ( Catalina ya no vive mas alli, ahora vive en Merida, Mexico), podia estar al tanto de mi visita.
Al llegar, toque timbre pero no habia nadie. Le pregunte al taxista si me podia esperar un ratito y el me responde muy amablemente que si. No me resignaba a marcharme asi como si nada. Entonces me cruce a un mercadito ubucado al frente y le pregunte al cajero si sabia algo de sus vecinos. Me contesto que no sabia mucho pero que si no estaba el ¨auto negro¨ estacionado en la puerta era por que no habia nadie.
Muy apenada me subi a mi taxi y nos marchamos. Al llegar a la esquina vi que nos cruzaba un auto negro y casi como por reflejo, le pedi al taxista que se detuviera. Me baje y corri hacia el auto, que para mi alegria vi que se habia deteniendo en la puerta de la casa en donde yo hasta recien habia estado tocando timbre. ¨Buenas tardes, mi nombre es Ma Eugenia y vengo de Argentina¨fue lo que me salio decirles a la pareja que aun estaba dentro del auto, asomandome por su ventanilla. ¨Bienvenida, te estabamos esperando¨.
Asi fue como conoci a Beatriz y Franz, un matrimonio encantador. Y enseguida se disculparon por haber llegado tarde. Tuvimos que ir a Radio Maria a dar una nota, me digeron, por ser el dia del cumpleaños de La Virgen. ¡Claro, era 8 de Septiembre, el dia en que la Iglesia toda celebra el cumpleaños de la Virgen ¡ Y yo no me habia dado cuenta, no me habia percatado de este ¨pequeño detalle¨. ¡Maria me invito a SU CUMPLE! ¡ELLA si tenia todo planeado, ELLA es terrible !
La casa es sencilla, de dos pisos. La Planta Baja ya nos es mas casa. Luego del Milagro Jesus se la pidio a Catalina y ella se la regalo. La parte de vivienda quedo toda en la planta alta.
Entramos los tres juntos, y muy tranquilamente me llevaron a la capilla (anteriormente era el living-comedor), y del lado izquierdo de un sencillo pero precioso altar me encontre con el cuadro del milagro de La Virgen de Guadalupe de Cochabamba. ¡Al fin ! ¡que emosion !
El cuadro es asi, tal cual lo habia visto en Internet, pero mucho mas bello y llamativo. Su Vestido realmente brilla. Hasta pareceria que en el ruedo se hubiera fromado un rosario de rosas bordadas de brillos multicolores. ¡Es hermocisimo!
Al estar los tres solos pude disfrutar de ese momento y de esta pareja tan amable que me recibio, y que me conto detalles sobre el milagro. Mientras tanto iban haciendo preparativos. Como era un dia de fiesta, habria un Rosario y luego la Santa Misa. Me invitaron a quedarme y se pusieron contentos cuando les respondi que por supuesto me quedaria. ¡Que mejor regalo !
Llegaron algunas personas para el Rosario. Un lindo grupito, hasta me ofrecieron guiar un misterio. Para la misa la capilla estaba casi colmada. Tuvimos una hermosa ceremonia, con musica de violines y otros instrumentos.
Al terminar, me acerque a Beatriz que estaba conversando con otras personas en lo que seria el atrio (puede haber sido un patio antes), para despedirme y agradecerles por tantas y tan lindas atensiones, pero ella volvio a soprenderme diciendome: ¨pero como te vas a ir justo ahora que le vamos a festejar y cantar el cumpleaños a Maria¨. Entro rapidamente en la Sacristia (lo que anteriormente era la cocina de la casa), y al minuto volvio con una torta de cumpleaños. Una tortasa espectacular de 50 cm de diametro por lo menos, hecha por una joven mama que estaba con su hijito tambien. Ademas era riquisima. Le cantamos entre todos los presentes, que se notaba eran todos amigos y conocidos. Y yo ya me sentia una mas entre ellos.
Mi corazon no podia mas de felicidade y de asombro. Impensado todo lo que estaba viviendo. Y todavia faltaba lo mejor.
De repente Beatriz dijo: le vamos a mostrar algo a Ma Eugenia. Como habian pasado las horas, ya se habia hecho de noche, entonces apagaron todas las luces y me guiaron hasta el cuadro del Milagro. A medida que nos ibamos acercando note, en plena oscuridad, que donde estaria ubicado el vientre de La virgen, estaba iluminado. ¡Su pancita brillaba ! Entonces yo exlame: ¡Esta embarazada ¡ Eran como miles de estrellitas que brillaban justo donde estaba su pancita en la imagen de La Virgen de Guadalupe. Un milagro dentro de otro milagro. Beatriz compartia conmigo la alegria y la emosion. Si te arrodillas se ve aun mejor, me dijo Beatriz casi como en secreto. Asi nos quedamos, todos de rodillas ante semejante imagen. Algunos veian entre esas estrelllitas, la Santa Faz, otros veian un bebe, yo feliz y agradecida de haber podido vivir todo este regalo del cielo.
Como si esto hubiera sido poco, mis nuevos amigos Beatriz y Franz se ofrecieron a llevarme en su ¨auto negro¨hasta mi hotel, de camino a su casa. ¡ Me parece que ELLA lo tenia todo planeado! ¡ Ella es terrible ¡
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